miércoles, 29 de agosto de 2018

RELATAR LO QUE SENTISTE, SINTIENDO LO QUE RELATAS

Un audiovisual, es la forma de mostrar una actividad o viaje que has hecho a los demás. De compartirlo.
Para mí siempre ha significado el intentar hacer partícipes de una emoción que va más allá de las simples palabras.
También un audiovisual es un perpetuo recuerdo para ti mismo, claro.
Se trata de explicar o más bien transmitir lo que sentiste, sintiendo lo que transmites mientras lo haces.
Se trata de acomodar las palabras a las imágenes, a la música, y más que narrar traspasar.
Después, si la gente en general, tus amigos, o familia, responden como ansiabas mientras forjabas ese audiovisual, por un instante te sientes “abrazado, y totalmente realizado”.
Mi primer audiovisual fue hace veintitrés años; en 1995, en el salón de actos de la UNED de Barbastro: 
Como todos los audiovisuales por entonces, estaba realizado con diapositivas meticulosamente ordenadas en sus correspondientes carros, acompañadas por música en casete, y todo narrado en directo micrófono en mano.
El sofoco eran los nervios de explicarlo en directo, y la emoción, la de cruzar los dedos para que no se te atascara ninguna diapositiva, se te callera un carro (lleno de diapositivas) al suelo al cambiarlo, o se fundiera la bombilla del proyector.
A este le siguió el Khan Tengri en (1997), con un audiovisual realizado de la misma manera y en el mismo formato.
Posteriormente, en la expedición al  Manaslu (1999), y el Cho Oyu en (2001), sendos ocho miles, ya introdujimos el ordenador, con un prehistórico montaje en PowerPoint, que entonces era lo más, evitaba los accidentes con las diapositivas, y llevaba la música integrada.
Como inconveniente, que la voz  seguíamos apostándola en directo de forma espontánea micro en mano, y no podías extenderte ni improvisar, porque las imágenes con la música seguían su marcha establecida.
Tras una tregua, en 2008, regresé a los audiovisuales narrando mis “pasiones” con una pionera e insólita actividad, al menos por entonces en mi Provincia: mi participación en la maratón de Sables, de la que realizamos uno que relataba mi experiencia en el desierto.
Este audiovisual “doméstico”, marcó un antes y un después.
 “La maratón de Sables” fue posible gracias a la imprescindible ayuda de mi amiga Patricia de Frutos y a la productora de sonido Sound Garden producciones de Madrid; amigos que se brindaron a montar las imágenes y la música que les proporcioné, añadiendo a ellas una locución profesional que ponía voz al guion que escribí sobre la experiencia.
Y por sorprendente e inesperado causó gran asombro, y tuvo un gran éxito.
Aún hoy en día lo tiene. Todavía recibo mensajes de gente que al haberlo visto se han animado a correr, o a participar en esa u otras carreras, o me lo solicitan para proyectarlo en algún evento cultural o deportivo.
Marcó un gran salto de calidad impensable para alguien que realiza un audiovisual doméstico, y evidentemente generó un interés creciente en los posteriores que fui realizando.

Al año siguiente (2009), “Yukon Arctik Ultra” sobre mi experiencia en esta carrera en el ártico Canadiense, elaborado en ese mismo estilo personal y muy íntimo, y de nuevo con la ayuda de Patricia y Sound Garden.
En el 2010, con mi guion, recreamos la experiencia que vivimos realizando el primer cruce mundial a pie y en globo sobre el helado mar Báltico desde Suecia a Finlandia  del que formé parte a pie.
En 2011, participé en la Jungle Maratón en el Amazonas Brasileño, pero por falta de las imágenes prometidas, que la organización nunca me mandó, me quedé con las ganas de realizarlo y poder compartir mi experiencia allí. (Una pena).
Ya en 2013, tras mi primera y exitosa experiencia acompañando un grupo organizado junto con viajes Barceló (ahora "Modoviaje") de Barbastro hasta la cima del Kilimanjaro (Tanzania),  mi club “Montañeros de Aragón” me invitó de nuevo que preparar un audiovisual de la experiencia para las Jornadas Montañeras de ese año. Algo que no tenía previsto. 
Así que escribí un guion, y con la ayuda de los participantes del viaje recopilé material gráfico suficiente (fotos y videos) para poderlo realizar.
De nuevo Patricia desde Soun Garden me proporcionó un excepcional doblador para poner voz a ese libreto, y un amigo (Hugo Loriente) me hizo el enorme favor de realizar el montaje para poder presentarlo.
Y aquí hubo otro punto de inflexión. Gracias a Hugo descubrí la cámara GoPro.
Hace cinco años no se conocía como ahora.
Me hice con una, y con ella fui practicando con la realización de unos descriptivos videos sobre el descenso de los diferentes barrancos de Guara que realicé en solitario. Algo que siempre había querido hacer.
Mi objetivo, con imágenes y música hacer partícipes a la gente del descenso de mis barrancos favoritos. Filmé unos catorce, y es un proyecto que aún está abierto, ya que continuaré filmando algunos más.
Esta experiencia me brindó la oportunidad, (hablando siempre desde el punto de vista de un amateur), de ensayar en todos los ámbitos: filmación, realización y montaje. Un yo me lo guiso, yo me lo como.
Y con ello avivé definitivamente mi propósito de en 2014, filmar, realizar y montar yo mismo, la experiencia vivida durante el segundo trekking que planeé que nos llevó hasta el Kala Patthar en (Nepal), de nuevo acompañando un grupo de viajes Modo Viaje.
Filmé con mi pequeña GoPro durante el viaje, y al regresar escribí el guion.
Esta vez, le pedí a Patricia que fuera ella la que le diera voz femenina al mismo, y con su locución realicé el montaje de sonido e imágenes yo conmigo mismo. Como anécdota he de señalar, que, hasta por dos veces, cuando ya tenía la película terminada se me borró por equivocación. La torpeza. Casi me dejo las venas largas del disgusto…
A la tercera fue la vencida y lo terminé, y se estrenó ese año en las jornadas montañeras. 
La cosa funcionó. Me salió un audiovisual bastante decente que gustó bastante.
Así que, en 2015, continué mi auto producción con el audiovisual, “Machu Picchu por Salkantay” (Perú), y en 2016 “Baguiraty,el nacimiento del Ganges”, con nuestra experiencia en el Himalaya Indio.
Y llegamos a este punto; Al día de hoy.
Hace diez meses, realicé el quinto viaje consecutivo de este proyecto.
Esta vez fue a Bolivia. Allí un trekking por la cordillera blanca, y la ascensión de el volcán Akotango de más de seis mil metros.
De nuevo provisto con mi pequeña GoPro (ya más que amortizada), filmé material para un nuevo audiovisual.
Audiovisual que como dirían en Hollywood, “está en pre producción”. Estoy en ello.
Ya he terminado la escritura del guion, y la próxima semana Patricia lo grabará en Madrid interpretando con su voz mis palabras, y a buen seguro como en los cuatro anteriores, le conferirá una luminosidad al montaje que difícilmente lograría yo con mi propia voz.
A continuación, me pondré manos a la obra con la elección de la música y el montaje de todas las imágenes, para tratar de reflejar lo más fielmente posible la experiencia de ese viaje por Bolivia; la emoción.
Una labor de chinos que he de confesar que ¡Me encanta!.

Y en noviembre o diciembre de este año, participaré de nuevo en las jornadas montañeras de mi club Montañeros de Aragón Barbastro, y pasará a engrosar la lista de mí ya dilatada filmografía amateur, jajaja.
He de señalar, que estos audiovisuales aparte de compartirlos en mi canal de YouTube, los cedo a Canal 25 (Televisión local de Barbastro) para que los emita.
Y sé que generalmente gustan o al menos interesan, porque desde que comencé, periódicamente me escribe gente que los ha visto en YouTube, o en la tele de Barbastro y ocasionalmente me paran por la calle felicitándome y manifestándome que los ven y les gustan; o eso dicen…
Esto me complace y enorgullece. Mentiría si dijera lo contrario. Así que muchísimas gracias.

jueves, 23 de agosto de 2018

30 AÑOS DE CHISTES DEL CRUZADO ARAGONÉS


Hace treinta años ya que dibujo chistes para el semanario local de Barbastro “El Cruzado Aragonés”.
Como pasa el tiempo.
Concretamente desde 1988 estando como directora Elena Martija (D.E.P).
Me gustaba mucho dibujar desde niño y lo hacía como hobbie, así que, no recuerdo bien el porqué, me ofrecí como dibujante colaborador al semanario de Barbastro.
Quizás fue la vanidad de los veintipocos años. Hoy en día seguramente no me atrevería a ofrecerme.
Y la respuesta de su directora fue afirmativa, pero con una inesperada propuesta: Dibujar viñetas o chistes; “Dibujar una tira cómica” fueron sus palabras exactas.
Curiosa y casualmente, a la vez se había ofrecido otro dibujante: Santi (Santiago Sánchez).
Así que la oferta de colaboración fue para ambos dos:
Realizar esta viñeta en semanas alternas. Una semana cada uno.
Y aunque era algo que ninguno de los dos habíamos hecho nunca, no sé si algo inconscientemente (hablo por mi), aceptamos el reto.
Pero, treinta años después, aquí seguimos intentando sacar una sonrisa al personal cada quince días en la contraportada del periódico.
Y para bien o para mal, en tantos años claramente hemos evolucionado en la forma y en el fondo, hasta incluso hallar un estilo propio.
Cada uno el suyo.
La calidad de nuestro trabajo, no seré yo quien la valore. Desde luego, y seguro que hablo también por Santi, está realizado con el mayor de los entusiasmos y ganas. No somos profesionales.
Aunque a una media de veinte viñetas al año calculando bajo, llevamos realizadas al menos seiscientas viñetas cada uno. 
Y repito; aunque no me considero más que un amateur o aficionado, si me siento dibujante humorístico o gráfico.
Porque pienso que cualquiera que dibuje de forma satírica en un periódico, revista, blog, Internet, cuaderno, o una simple servilleta de papel para mostrarla a los amigos e intentar obtener su sonrisa, lo es.
Se trata de utilizar tus mejores o peores habilidades como ilustrador, y apoyarte en la sátira para realizar observaciones, razonamientos o críticas visuales de la vida social, de una forma irónica y más o menos divertida.
Siempre intentas que sea lo más divertida posible claro.
Reconozco que como casi todas mis ideas, reflexiones o incluso aventuras, las ideas de los chistes casi siempre surgen en momentos de aislamiento introspectivo… cuando corro o camino por el campo o la montaña.
Y depende mucho de la inspiración. Unas veces surge con facilidad, y otras es un auténtico parto.
Casi siempre, más que el chiste en sí, me cuesta concluir el tema sobre el que hacerlo. Cuando tengo el tema en la cabeza, me aparecen las ideas y la inspiración con bastante facilidad. Me he dado cuenta que con la práctica de los años, desarrollas una especie de instinto para sacar ideas casi a diario de noticias que escuchas, cualquier conversación u observaciones a tu alrededor.
Como un modo inocente de expresar mis inquietudes o la de los que te rodean, y plantear diferentes enfoques a través del dibujo, la sonrisa o la risa.
Muchas veces te inspiran circunstancias personales, pero otras muchas en lo que observas a tu alrededor, siendo solo objetivo portavoz.
Es humor apoyado en el uso de la ironía, la exageración e incluso en algunos casos el ridículo, para exponer o señalar acciones de alguien en particular o de la sociedad en general.
Muchas veces una forma de reírnos de nosotros mismos.

Y después de tantos años, incluso en un periódico humilde de pueblo, he comprendido muy bien que este tipo de creación es complicada, debido a tu exigencia personal pretendiendo la búsqueda del equilibrio entre lo irreverente y la corrección, entre tu propia sensibilidad y la de quien lo lee.
Como me dijo una vez Lolo San Pedro, la actual directora del Cruzado, la viñeta es una de las pocas formas de periodismo que aún goza de total libertad.
No lo entendí entonces, quizás porque no contemplaba una viñeta como una forma de periodismo; pero ahora lo entiendo perfectamente, y en cierta forma me siento periodista.
Las caricaturas o chistes, son mensajes cortos e ingeniosos, y resultan ser un excelente y rápido medio para la transmisión de cualquier mensaje.
Y van mucho más allá de esa manifiesta y graciosa fachada.
Son una forma sana de recobrar algo la potestad ante los que controlan el poder y nuestras vidas.
Un caricaturista o dibujante gráfico, es como un solitario mercenario que dispara siempre con la esperanza de dar de forma eficaz, aunque no incontestable, en la diana. Su humor es su arma; Un arma que no mata.
Porque verdaderamente el humor es nuestra última defensa; la que nos aleja de la incultura, la tiranía y el salvajismo.
Uno ríe y sonríe cuando es feliz. La risa disminuye la diferencia entre las personas. Es un idioma universal. Y uno se atreve a reírse del que más tiene o del intolerante, que casualmente es el que menos lo entiende.
Porque quienes viven conquistados por la necedad y perturbados por el odio, no soportan la libertad, y menos aún si esa libertad te la da el humor y la risa.
El humor, la risa, es un amotinado grito de libertad, y como tal es ingobernable.
El humor nos hace libres y fuertes.
Así que si Lolo. Ahora si lo entiendo y además lo practico.
No sé cuántos años más seguiré dibujando estas viñetas; De momento treinta, y estoy orgulloso de ello.