EL AUDIOVISUAL:

Explicar lo que se siente cada año ante la respuesta y el calor de tantos amig@s acompañándonos el dia de la proyección del audiovisual es imposible.

¡Sin palabras!.

Y aun con experiencia del pasado,  y a pesar de que llevemos cuatro años seguidos con estos audiovisuales, yo cada vez es como la primera, y comienzo mirando incrédulo a mí alrededor.

Después, en esta ocasión en el que fue todo muy formal debido a la presencia del alcalde de Barbastro, tragas saliva y esperas dar la talla y estar a la altura, pero confiando que sabrán perdonarte si te equivocas o no lo estas.

Consciente, que si eso ocurre, nunca será por tu falta de celo, ni de empeño.

Primero las protocolarias presentaciones, y ruborizarse un poco con los inmerecidos y protocolarios cumplidos y distinciones, (habituales en un acto así), hechos por los presentadores José Masgrau, David de Modoviaje y Antonio Cosculluela (Alcalde de Barbastro); muchísimas gracias a todos ellos. A continuación, con lapsus incluido (me quedé en blanco), di paso yo a la proyección, y se apagó la luz.

¡Y allí estaba!. Por fin queda revelada nuestra aventura. La labor y los recuerdos desde mi perspectiva, por fin desguarnecidos, emancipados.

Son eso, recuerdos.

Y los recuerdos son un modo de agarrarte a las cosas que no quieres perder, que quieres, y en definitiva a lo que tú eres.

Tras cuatro años seguidos, cada año se duplica nuestra responsabilidad y capacidad de compromiso, pero asimismo nuestra alegría, y nuestra facultad de desear. La pasión puede ser racional, pero lo normal es que no lo sea. Brota ante algún estímulo.

Y así, cada año llego a este marco y miro, me siento, y durante casi una hora me expreso por medio del audiovisual y la fantástica locución de Patricia.

Y nadie me obliga, y cada año es mi elección apostar por esa mi particular visión, y poder perder.

Pero, gracias a mis compañeros de viaje, y a tanta gente que con sus ánimos y su presencia nos revalidan, cada año salimos ganadores.

Y nos sentimos escuchados, abrazados y sobre todo comprendidos.

Con ese abrazo de corazón, afectuoso y solidario. También sanamente envidiados claro...

Abrazos, felicitaciones, aplausos, y  muchos cumplidos. Todo puro e incondicional.

Muchísimas gracias a todos los que nos disteis todo esto en Barbastro, y después ayer en Estadilla, y sobre todo por vuestra compañía en algo tan especial.

Y aquí está el resultado de, por circunstancias personales,  muchas horas robadas al sueño.

Aquí para quien quiera verlo, por fin el audiovisual completo:

¡MONUMENTALES GRACIAS!