Incluso
algunos que aún no corren, tras ver el
extraordinario ambiente (espero que no fuera solo por la caña), aspiran a
calzarse las zapatillas y salir por primera vez...
Así
que, coincidiendo con que la próxima semana comienza el taller para corredores
que organiza el buen amigo José Mª Lacoma (aun estáis a tiempo de apuntaros), y
como es la época del año mas propicia para ello, si estás pensando seriamente
en comenzar a correr, y por fin ponerte en buena forma, aquí te resumo algunos
pequeños consejos:
- Usa unas buenas zapatillas.
Esto es muy importante, porque unas zapatillas inapropiadas,
pueden causarte como mínimo molestias, o peor aún lesiones, e incluso conseguir
que renuncies a tu intento.
Con unas buenas zapatillas específicas para tu propósito, todo
es mucho más fácil. Y no tienes por qué gastar mucho dinero, pero si dejarte
aconsejar por expertos a la hora de elegir un modelo acorde a tus
características y a tus objetivos, que protejan bien tu pie y tus
articulaciones, y se adapten a tu zancada y pisada. Aunque, tampoco te vuelvas
loc@ con este tema; recuerda que estás comenzando...
- Muy Poco a poco (Paciencia).
El primer día no hay que correr una hora, y mucho menos una
media maratón. Comienza lentamente. 10 o 15 minutos si hace mucho que no haces
ejercicio; 20 o 30 si ya practicabas algún deporte.
Dependiendo de tus sensaciones, compagina correr con andar. Y
sobre todo, “no sufras”, ten paciencia, y gradualmente comenzaras a correr más
tiempo, más distancia, y finalmente y casi sin querer, esa distancia en menos
tiempo.
Al terminar, camina o corre cinco minutos muy lento para
permitir a tu corazón recuperar tus pulsaciones.
Estira.
Nunca termines sin estirar. Créate la rutina de hacerlo, te
evitará lesiones y tensión en los músculos.
No hay nada malo en estirar, y mucho en no hacerlo, así que está
claro, mejor hacerlo. Solo son cinco minutos.
Terreno.
No te límites ni reduzcas tus alternativas. Corre por diversas
rutas, y en distintos lugares y terrenos (es divertido).
Siempre que el tiempo te lo permita, mejor al aire libre y en un
itinerario que te complazca.
Si es por la calle, o en pista, ya es una cuestión de
posibilidades, gustos y preferencias. Bueno, alguna vez de obligación si solo
puedes hacerlo en la cinta de un gimnasio...
Beber
Si hace calor, lleva una botella de agua en la mano, en un cinturón
especial para ello, o un camelback, y mantente hidratado tomando pequeños
sorbos. No te anegues de agua, la idea es mantenerte hidratado durante el
ejercicio, no atiborrarte cuando tengas mucha sed. Esto te dará más
resistencia.
Música o radio.
Correr no tiene por qué ser aburrido, y de hecho no lo es, y si
vas solo, la música o incluso la radio, es un buen aderezo.
Descanso.
Una de las partes más desdeñadas del ejercicio una vez que estas
“embriagado o enajenado”, es descansar. Y tu cuerpo, tus piernas, tu sistema
cardiovascular lo necesita para sanar y recuperarse.
Muy importante durante la iniciación, porque es en ese periodo
en que tus piernas se desarrollan y sé musculan.
Aun así, y desde que está de moda esto de correr, que es algo
tan antiguo como el hombre, y yo pienso que algo natural y propio desde que
nacemos, parece que todos somos letrados y doctos, y nada más lejos. (Si
entiendo en los profesionales o semi..., el entrenar su técnica de carrera)
No intento aleccionar a nadie. Simplemente aconsejar basándome
en mi experiencia de años haciéndolo. Porque experiencia, no es más que el
epígrafe que le damos al resultado de nuestras equivocaciones.
Las lecciones, van amparadas por sabiduría y hechos, los
consejos por experiencias, muchos errores, altruismo y sobre todo buena
voluntad.