Este encabezamiento no es un epitafio, ni una dedicatoria, ni una despedida; sencillamente, hay incisos en tu vida en los que te da por pararte, mirar atrás, hacer balance, evaluar y recapacitar sobre lo vivido y sobre lo aprendido. Nunca con desazón o arrepentimiento, siempre con conformidad, humildad y respeto de quien ha intentado acertando o herrando, vivir honorablemente y hacerlo lo mejor que supo; en este caso una trayectoria "deportiva".
Además, ya no puedes cambiar nada, el pasado ha huido, y fuere como fuere, lo importante es obtener lo mejor, sintetizando los aciertos y apelar a las equivocaciones para progresar.
Este ejercicio de madurez o juicio, quizás es una consecuencia de presentir que he consumido una etapa; o por parecerme estar en ciernes de otra nueva que está por presentarse y no sé que me deparará; o por haber concluido los empeños que tenia en mi cabeza; o por la edad... no sé... Si soy consciente que la paternidad ha supuesto un extraordinario punto de inflexión en mi vida, y tras ello tengo el sentimiento de haber completado una etapa de mi vida, y estar abordando otra nueva; seguramente mucho mejor.
Sin lugar a dudas, el tiempo graba su "huella" en todo, y todos los seres vivos sentimos sus efectos en nuestros cuerpos y en nuestras mentes.
Vivir no es solamente existir, sino existir, realizar, saber, y asimilar el disfrutar y el padecer. No dormirse jamás sin soñar.
En mas o menos esta mitad de mi vida he aprendido que no se puede dar marcha atrás; que la realidad de la vida va hacia delante; que estar preparado es importante, saber esperar aún más, y la clave de todo, agradecer y aprovechar las oportunidades.
Además, ya no puedes cambiar nada, el pasado ha huido, y fuere como fuere, lo importante es obtener lo mejor, sintetizando los aciertos y apelar a las equivocaciones para progresar.
Este ejercicio de madurez o juicio, quizás es una consecuencia de presentir que he consumido una etapa; o por parecerme estar en ciernes de otra nueva que está por presentarse y no sé que me deparará; o por haber concluido los empeños que tenia en mi cabeza; o por la edad... no sé... Si soy consciente que la paternidad ha supuesto un extraordinario punto de inflexión en mi vida, y tras ello tengo el sentimiento de haber completado una etapa de mi vida, y estar abordando otra nueva; seguramente mucho mejor.
Sin lugar a dudas, el tiempo graba su "huella" en todo, y todos los seres vivos sentimos sus efectos en nuestros cuerpos y en nuestras mentes.
Vivir no es solamente existir, sino existir, realizar, saber, y asimilar el disfrutar y el padecer. No dormirse jamás sin soñar.
En mas o menos esta mitad de mi vida he aprendido que no se puede dar marcha atrás; que la realidad de la vida va hacia delante; que estar preparado es importante, saber esperar aún más, y la clave de todo, agradecer y aprovechar las oportunidades.
Mirarse al espejo y aceptar quien eres, pues somos la suma de nuestras virtudes y defectos, de nuestros aciertos y errores.
ResponderEliminarHermoso y elocuente entrada de tu blog.
Un saludo.
Juan
Como siempre... emotiva colección de imágenes, llenas de contenidos, sensaciones, antiguos y nuevos amigos... que la historia continué y que puedas contarnos muchas cosas más durante mucho tiempo.
ResponderEliminarUn beso muy gordo
Resumen provisional muy emocionante. El color del pelo te cambió un poco, pero el espíritu continúa igual y con excelente compañía ¿no?.
ResponderEliminarQué bueno mantener la ilusión e ir viviendo los propios sueños...
Grande, Javi.
Los pelos como escarpias por tu escrito y por el video. Eres grande y un gran ejemplo
ResponderEliminarYa me gustaría a mi la mitad de tu experiencia deportiva en toda mi vida entera. Muy chulo el vídeo
ResponderEliminarUnas cosas conducen a otras. Todo es un aprendizaje para lo que está por llegar, y tu has sido un claro ejemplo de ello. Seguro que nos sorprenderas en un tiempo con nuevas locur…aventuras. En serio, has sido un ejemplo como deportista todos estos años. Aún mas, creo que has marcado en este terreno a muchisima gente, y a buen seguro lo seguiras haciendo. El video impresionante.
ResponderEliminarLo que has escrito, aparte de emocionarme, me parece una acción mas de madurez. Tan solo suplicarte que no dejes de transmitir tus cosas en este blog, porque somos muchos los que te seguimos y siempre nos sentimos identificados. Seguro que tendrás muchísimas cosas que contar en esta nueva etapa.
ResponderEliminarCada día de nuestras vidas es una nueva aventura, diferente según las circunstancias, y el saber adaptarnos a ellas nos hace grandes. Sin duda tu sabes hacerlo.
ResponderEliminarEl pasado se ha vivido pero no huye, lo que huye es el tiempo.El pasado queda dentro de nosotros y gracias a la experiencia que nos aporta crecemos como personas.
ResponderEliminarUn saludo
27 años haciendo el cabra por montes barrancos desiertos y hielos... jajaja... "ya te vale" diria el bigotes Edu.
ResponderEliminarGracias A todos por vuestras aportaciones.
ResponderEliminarFernando: Es una percepción muy personal; en algunos casos (como es el mío) puede parecerte eso mismo, “que el pasado ha huido”; en otros quizás todo lo contrario, que el pasado te persigue; incluso otros quizás, muy por el contrario, son ellos quienes huyen del pasado.
No es una verdad absoluta, es una impresión propia.
Orni: jo!!! Si!!! 27 años haciendo el cabra en forma “fotográfica”, porque por lo que cuenta mi madre empecé mucho antes “ya marcaba”… y los que me quedan!!! Beeeeeeeeee!!!!