Un pájaro no canta porque tenga una respuesta. Canta porque tiene una canción.
¿Cruzar el mar Báltico helado? ¿escalar una montaña? ¿Cruzar un desierto
corriendo? ¿correr una
maratón? ¿un iron man? ir hasta Huesca corriendo… "¡Tu estás loco chic@!".
maratón? ¿un iron man? ir hasta Huesca corriendo… "¡Tu estás loco chic@!".
Muchas veces cuando no entendemos algo lo tachamos inmediatamente de
locura o lo juzgamos.
Esa sana locura, que todos sentimos en alguna ocasión, esa especie de
necesidad que nos obliga a ir más lejos, más alto, buscar lo más
difícil, o ir hacia lo desconocido.
Ese espíritu que despierta la
capacidad de soñar y luego, la necesidad de perseguir y hacer realidad
esos sueños, ¿es una locura?.
Normalmente todos sentimos eso a diario, pero no nos paramos para apreciarlo ¿o no?.
Habitualmente
tomamos el camino más fácil, aquél que nos proporciona la estabilidad y
tranquilidad, y dejamos en segundo lugar ciertas emociones que, no por
deseadas, se nos antojan peligrosas o las imaginamos irrealizables.
Lo que verdaderamente enriquece es vivir, preguntarse por las cosas, y
exprimir ese montón de insólitas sensaciones; esas inéditas vivencias
que te obligan a extraer de ti mismo lo antes inimaginable, ya sea para
ascender una montaña, cruzar un desierto, descender un barranco o correr
una media maratón.
Para mí, la auténtica
hazaña no está en lo conquistado, sino en el camino, en atreverse a
intentarlo, y disfrutar del trayecto. En el fondo, en tu fondo, todo es
lo mismo. Soñar con algo, vencer tus imaginarios miedos o limitaciones, e
ir a por ello, independientemente de lo que nadie pueda pensar o decir.
Realmente
es una necesidad de superación personal que todos tenemos, una especie
de búsqueda mental de nuevas formas de concebir tu propio mundo, de
construirlo. Hagas lo que hagas, propongas lo que te propongas, todo
conduce al mismo lugar: Tu mismo.
Una
vez escuché, que la necesidad interior en el ser humano lo lleva a
buscar la energía de la que un día salió para fusionarse de nuevo en
ella. Suena bonito.... Quizás esta latente misión te conduce a buscar
dentro de ti, pero también fuera, más lejos, en lo que parece
inalcanzable.
Tu valentía (o tu osadía que da igual), cuando un día
decidiste bajar ese barranco que tanto miedo te daba, ascender esa
montaña que siempre veías en el horizonte soñando que pisabas su cumbre
pero te parecía inalcanzable, o cuando por primera vez corriste esa
media maratón que te parecía imposible, consigue que sientas por un
momento palpitar una especie de eco de felicidad, y que a tu alrededor
exista un halo de armonía entre lo que quieres y deseas y lo que se
realmente tienes. Eso es lo que no nos deja parar; estar quietos.
Si miramos dentro de nosotros mismos objetivamente ,
entenderemos esa razón... o esa locura.
PD: Tras dos semanas parado, el dolor ha remitido, pero no la inflamación. Hoy tengo visita mediaca y espero que me quite liquido. He decidido arriesgar y retomar poco a poco el entrenamiento. Si la lesión remite, perfecto. Si no, pues me veré obligado a parar, renunciar a Ronda, y curarlo bien para Lavaredo. No me queda mucho margen de maniobra… Gracias a todos los que me habéis escrito en público o privado por vuestro interés.
PD: Tras dos semanas parado, el dolor ha remitido, pero no la inflamación. Hoy tengo visita mediaca y espero que me quite liquido. He decidido arriesgar y retomar poco a poco el entrenamiento. Si la lesión remite, perfecto. Si no, pues me veré obligado a parar, renunciar a Ronda, y curarlo bien para Lavaredo. No me queda mucho margen de maniobra… Gracias a todos los que me habéis escrito en público o privado por vuestro interés.
Genial tu reflexión... Sería tan sencillo como que cada uno se marque para sí mismo esa fina línea que separa la cordura de la locura en el punto que más le plazca y el resto de personas respetáramos ese trazo. Javier, si mis pies han de cruzar una línea, deseo que sea hacia el lado de mi propia locura.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pepe Badel.
Veo que me has entendido Pepe. Un abrazo
ResponderEliminarLo primero,Javi, desearte una pronta recuperación y que la paciencia no te falte. En estos momentos estoy en el instante de dar el paso de plantearme un gran reto para mi y claro, el miedo está ahí, pero es verdad que el mismo vértigo he ido sintiendo según me enfrentaba por primera vez, como dices, a un medio o un maratón. Así que ya ves, estoy a un paso de que me vuelva a invadir esa sana locura que me cambió la vida y me hace levantarme cada mañana con la ilusión de intentar superar mis limitaciones, que son muchas. Y como siempre gracias a ti por estos posts...
ResponderEliminarGracias Manu. Ayer me pincharon corticoide, y mañana espero poder comenzar. A ver que pasa.
ResponderEliminarLa locura es muy sana, no lo dudes y adelante!!